El estudiante de Rehabilitación Física del ICB compitió con 200 atletas de 19 países
Reconocimientos, preseas colgadas en la pared y barras verticales de hasta dos metros de altura ensambladas en el piso y techo, es la decoración del gimnasio en el que Karim Luna Santana, alumno de Terapia Física y Rehabilitación, atiende a Gaceta UACJ, y que es reflejo del enfoque, pasión, constancia, entrega y preparación dentro de la disciplina del pole sport, deporte en el que es subcampeón mundial 2023.
El oriundo de la colonia Benito Juárez, en Santa Rosalía de Camargo, la “Cuna de Artistas”, le dio un cerrojazo a su calendario competitivo de 2023 con su notoria participación en el Campeonato Mundial de Pole Sport celebrado en Jyväskylä, Finlandia.
Karim Luna es hoy por hoy el responsable de poner en el mapa mundial a esta Universidad tras sumar 129 mil 700 puntos, otra de las mejores marcas extranjeras cosechadas en su trayectoria profesional de casi dos décadas, antes fue la presea de oro que obtuvo en el Mundial de Pole Sport 2019 celebrado en Montreal, Canadá, en la categoría Júnior.
“Significa mucho. La verdad llegué satisfecho del resultado y es un deporte nuevo, no muy conocido, pero que aun así hay deportistas que logramos representar y poner en lo alto a nuestro país. Sin embargo, otros logramos poner a Camargo, Chihuahua y México en la cúspide”, afirma con certeza.
En la citada y última justa en la que tuvo acción el año pasado fuera del país, Karim logró adjudicarse el metal plateado en la categoría Hombres Mayores Competitivos, completando el podio con el español Albert Roig Amores (oro) con 142 667 unidades y el estadounidense André Jones (bronce) con 118 867 puntos.
“Cada uno nos llevamos alrededor de diez puntos de diferencia. Entonces estuvo reñida (la competencia), pero los jueces fueron los que detectaron nuestros errores, lo que nos hizo diferenciar el lugar que nos ganamos cada uno con lo suyo y con su estilo”, cuenta.
La competencia deportiva reunió a 200 atletas internacionales en las categorías Amateur, Competitiva y Parapole, en representación de 19 países.
Al evento se sumaron los entrenadores y otros miembros de las delegaciones mundiales, 30 jueces de 10 países distribuidos en cuatro paneles que se encargaron de evaluar “la técnica y lo artístico de muchas coreografías, sobre todo en el pole sport, que es muy específico con su código para intercalar y ser justos a la hora de calificar”, enfatiza Karim.
Añade que, a escasos días de que se celebrara el concurso, viajó de Ciudad Juárez a Camargo para encontrarse con su coach, Ana Cristina Velo, y definir los últimos detalles. De allí viajó a la capital de la entidad para programar su destino a la Ciudad de México y partir a Londres, Inglaterra; “eso fue el 21 de noviembre y llegamos a la Gran Bretaña el 22 (de noviembre) al medio día”.
“Nos quedamos todo ese día en Londres y el 23 de noviembre volamos a Helsinki, Finlandia. Y llegando a Helsinki tomamos un camión a Jyväskylä, a la que arribamos durante la madrugada”, narra el alumno que viajó a través de ocho zonas horarias para competir contra los mejores del mundo.
Gracias a sus frecuentes éxitos, Karim Luna Santana es el único latinoamericano que alcanzó la final del certamen más importante que convoca la Federación Finlandesa de Pole Fitness (FPFF, por sus siglas en inglés), la Asociación Mundial de Eventos Pesados (WHEA, por sus siglas en inglés) y la Federación Mundial de Artes y Deportes de Pole (POSA, por sus siglas en inglés).
Con el respaldo de su mentora, Ana Cristina Velo, de las autoridades de la Federación Mexicana de Pole Sports (Femexpole), así como de la UACJ, su casa de estudios, la rutina de Karim es tan exigente como demandante.
“A lo largo del año diariamente entreno poquito más de tres a cuatro horas, depende del ejercicio que lleve, ya sea si me pongo a hacer acondicionamiento o flexibilidad. Cuando hago flexibilidad es cuando duro más tiempo, entonces me aviento como dos horas de esta, a veces en la mañana, y ya vengo en la tarde y practico lo que resta dependiendo de cómo me acomode con los horarios de la Universidad”.
La meta del especialista en movimientos acrobáticos es “llegar a Italia, ya que allí se planea el próximo Mundial de la disciplina. No tengo mi lugar asegurado, así que hay que empezar de nuevo; tengo que ir a Tijuana en marzo a mi competencia regional para poder clasificar al Nacional, y si todo resulta bien, lograr en el Nacional los primeros lugares para asistir al Mundial”.
De lo contrario, Karim buscará alternativas como el Pole Championship California, en Estados Unidos. “Allí van atletas de muy alto nivel, pero con mucho nivel que nos gustaría experimentar y calarnos”, acentúa.
“Este reconocimiento se lo dedico a mi familia, ya que sin ellos no podría lograr ninguna de mis competencias, pues son mi base en la vida. A mi entrenadora y a sus parientes que me apoyan, apuestan y creen en mí. ¡Esto es una victoria para Camargo y para Juárez que también es parte de mi vida ahora!”, reflexiona Karim.
Adentrándonos en su vida personal menciona que su padre es el encargado de administrar el Hospital General de Camargo, mientras que su madre forma parte del Registro Público Vehicular (Repuve) y su hermano mayor es comunicador en esta frontera.
Cuenta que su hermana y él “desde chiquitos hemos compartido la pasión por el baile, tanto jazz y danza aérea. En pocas palabras, lo que he hecho yo lo ha hecho ella hasta que yo me decidiera irme por el lado del pole, pero ella ya es una excelente bailarina, a la cual admiro mucho y le debo bastante, porque se involucró en mi coreografía (artístico y baile en piso)”.
“Nada es imposible, tienes que tener determinación y disciplina. Hay veces en que la motivación no está presente, pero si eres disciplinado crean que sí se va a poder, pues en el deporte se logran grandes cosas”, motiva a la comunidad universitaria.
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